top of page

20 señales que podrías estar trabajando para la compañía equivocada.

Tal vez acabas de empezar a trabajar en una nueva empresa, o tal vez ha estado trabajando con una compañía ya por algún tiempo. Pero algo parece ir mal. No puedes poner tu dedo en la llaga, pero en tus más profundos sentimientos, sabes que algo está mal.

 

Aun así, ignoras el sentimiento y te mantienes haciendo lo tuyo. Meses o años después, te sientes miserable. La mecha en tu genio y paciencia se han acortado drásticamente. Ojalá te hubieras dado cuenta desde el principio que estabas trabajando para la empresa equivocada. Esa poca de conciencia podría haberte ahorrado mucho descontento y tiempo.

 

Aquí hay algunos signos que debes descubrir en ti, signos que pueden ayudarte a saber si la compañía con la que estas no es la adecuada. Toma tu bebida favorita y continúa leyendo.

 

1. NO CREES EN LO QUE HACE LA COMPAÑÍA

 

Este es un gran tema, aunque puede que no lo veas al principio. La empresa para la que estás trabajando podría estar en un sector de negocios poco deseable. Tal vez el producto que ayudas a producir no cumple con tus valores personales. O tal vez la compañía se involucre en prácticas comerciales en las cuales tu ética no se siente del todo bien. Las posibilidades de que este problema se solucione son escasas o nulas. De hecho, la idea de que no puedes alinearte con el corazón mismo de la compañía debería decirte, de inmediato, que es momento de empezar a buscar opciones.

 

2. TUS TALENTOS ESTÁN SIENDO DESPERDICIADOS

 

Tus habilidades son muchas. Conoces la forma de operar mejor que nadie en la empresa. Tu destreza en los procesos y el manejo de las herramientas a tu cargo son incomparables dentro del departamento. Y sin embargo todas esas habilidades se desperdician. ¿Por qué? Debido a que la compañía tiene una forma de trabajar diferente, el jefe ha decidido ir por una ruta diferente, la compañía sufre de un bloqueo del proveedor, o aún está atrapada a principios de la década de 2000. Cualquiera sea la razón, toda la capacitación y las habilidades que poseas se van a desperdiciar. En este caso tus opciones son que, a menos que enfrentes a los que tienen el poder para poder efectuar un cambio en la forma de operar, te vas a sentir cada vez más frustrado a medida que pasan los días.


3. TE SIENTES POCO VALORADO

 

Todos hemos sentido esto en un momento u otro. Pero cuando persiste, puede haber un problema más profundo. Cuando eres un empleado recién egresado de la universidad, es común sentirse subvalorado; pero eventualmente, ese sentimiento debería disminuir. Si has estado en el negocio por algún tiempo y aún te sientes poco valorado en tu empresa, podría ser el momento de comenzar a buscar en otra parte.

 

Esa sensación puede incrustarse bajo de tu piel y devorar tu confianza. En el mundo laboral, la confianza ayuda a mantener la cabeza fuera del agua. ¿Hundirse o nadar?

 

4. SIENTES FRUSTRACIÓN CONSTANTE

 

Un trabajo complejo y la frustración van de la mano. Pero si la frustración nunca cede, si te despiertas por la mañana sintiendo su peso y te vas a la cama presionando tu pecho, puede que sea el momento de encontrar un nuevo lugar para desarrollarte. Hay ciertas compañías que simplemente no manejan bien la presión. Los superiores no dudan en meter presión a todos los que están debajo de ellos. También hay empresas que manejan la presión increíblemente bien. Si no puedes lidiar con la frustración constante, es posible que desees buscar un empleador que sepa cómo trabajar bajo el estrés persistente de la compañía.


5. HAS PERDIDO LA PASIÓN POR EL TRABAJO

 

La mayoría de la gente ingresa a trabajar con una pasión inquebrantable por lo que aprendió en la escuela o aplicar lo que lleva de experiencia en su vida laboral y desea poner en práctica sus conocimientos en el puesto. Algunas compañías felizmente nutrirán esa pasión y otras estarán más que dispuestas a ayudarte a perderla. La idea es que las compañías te ayuden a alimentar el deseo de llegar a los resultados finales del negocio y que encajes perfectamente en la maquinaria. Si te encuentras perdiendo la pasión por lo que haces y dudas de lo que alguna vez creíste que iba a ser tu desarrollo personal, pregúntate si está sucediendo naturalmente o si la compañía está apagando tus llamas de la pasión con el agua de los negocios.

6. DESCUBRES UN TECHO MUY BAJO SOBRE TI

Enfrentémoslo: aceptaste el trabajo asumiendo que serías capaz de ascender de rango y algún día tomar el cargo de líder o al menos ser la cabeza de un proyecto relevante. Desafortunadamente, cuando miras por encima de ti, todo lo que ves es que el techo es mucho más bajo de lo que originalmente pensaste. Eso significa, una cosa: la oportunidad no puede esperarte. Si ves esto y la posibilidad de ascender está cerca del tope de tu lista, es hora de que te des cuenta de que tu empresa podría no ser la mejor opción para ti.


7. YA NO QUIERES DECIRLE A LA GENTE DONDE TRABAJAS

Cuando te contrataron por primera vez, lo más probable es que estuvieras orgulloso de proclamar: “¡Soy un empleado de X!”. Pero cuando esa ilusión desaparece y si te has avergonzado de admitir dónde trabajas y lo qué haces, tienes un problema mucho más profundo a la mano y querrás solucionarlo lo antes posible.

8. DEJAS DE RESPETAR A LOS QUE ESTÁN ARRIBA

Esto puede ponerse realmente feo. Cuando pierdes el respeto por tus superiores, puedes terminar de alguna manera bastante desagradable. Podrías comenzar a aflojarte en el trabajo o comportarte de forma beligerante; podrías comenzar a difundir chismes o a negarte a hacer tu trabajo por completo. Al final, esa falta de respeto que has desarrollado para tu jefe sólo te hará daño. Terminarás en libertad condicional o despedido. Una vez que se dispara, esa mancha puede ser un punto muy malo en tu historial que es un desafío a eliminar. Si sientes que el respeto se desvanece, trabaja en eso de inmediato. A veces la única solución para eso es seguir adelante en otro lado.

9. NO TIENES IDEA LO QUE ESTÁS HACIENDO

Es posible que hayas sido colocado en una posición que no coincida con tus habilidades o que el jefe del departamento simplemente no tenga idea de qué hacer contigo. Pero cuando te sientes incómodo durante toda la semana, sin saber cuál es tu propósito o dónde encajas, es hora de confrontar a quienes te  contrataron y averiguar si este problema puede remediarse o si es el momento de irse. Puedes empezarte a ocupar en algo mucho antes de que los problemas empiecen a agravarse.


10. TIENES UNA ESPECIE DE “COMEZÓN"

Ya sabes la "comezón" de la que estoy hablando. Quieres un nuevo reto, un nuevo aire. Esto es común en el mundo laboral. Has estado trabajando en la misma empresa / departamento / rol durante años y ya no te sientes desafiado. Los profesionales en las empresas deben ser desafiados, necesitan resolver los grandes problemas y salvar el día. Si te has encontrado en un interminable bucle de trabajo rutinario, perderás rápidamente lo que queda de tu cordura. La opción es salir mientras aún estés dando resultados.

11. NO TE SIENTES BIEN RETRIBUIDO ECONÓMICAMENTE

Si no sientes que se te está compensando adecuadamente por tu trabajo, puede llevarte a renunciar. Esto es especialmente cierto si sientes que hay discrepancias salariales importantes en tu división o que te saltaron para un aumento salarial anticipado. Una persona que se siente mal pagada siente que no tiene un valor significativo para la compañía, lo que puede llevar a sentir resentimiento con tu empleador.

12 HAY CONFLICTOS DE PERSONALIDAD

Si bien siempre habrá al menos algunos conflictos de personalidad menores en el trabajo, si estás tratando continuamente con alguien que no te agrada, puede que esto te lleve a renunciar. Algunas personas simplemente nos tratan de la manera equivocada y si no hay una manera de llegar a un compromiso o "estar de acuerdo en estar en desacuerdo", los pequeños problemas pueden acumularse a lo largo del tiempo. Esto es especialmente cierto si la persona con la que tienes el problema es tu jefe.

13 PROBLEMAS DE LIDERAZGO

Los empleados mal manejados renuncian con frecuencia porque no sienten que tener apoyo o dirección profesional. Si tu jefe no te entrena adecuadamente o te apoya en tus funciones laborales, puede ser frustrante. Las personas que sienten que están a la deriva en el trabajo pueden desencantarse con su puesto y seguro renunciarán.

14. HAY UNA SOBRECARGA DE TRABAJO

Nada desgasta a los buenos empleados tanto como una sobrecarga de labores. Es muy tentador sacarle todo el provecho a los mejores elementos, pero presionar demasiado a los elementos positivos de un equipo los hace sentir castigados por ser buenos en su labor. Es una medida contra productiva. Un nuevo estudio en la Universidad de Stanford demuestra que la productividad por hora disminuye dramáticamente cuando la semana laboral excede las 50 horas de trabajo.

Si se incrementa la carga de responsabilidades de un buen empleado, lo normal es que se suba de puesto y salario. Los empleados talentosos son capaces de asumir nuevas obligaciones, pero no se quedarán si se empiezan a sentir sofocados. Si solo se le da más trabajo a una persona “porque puede con la carga” sin cambiar algo de su condición, buscará un nuevo empleo que le dé lo que merece.

15. NO SE CUMPLEN LAS PROMESAS

Cuando tu jefe cumple con lo que te promete, él crece a los ojos de sus empleados porque prueba ser de confianza y honorable (dos cualidades imprescindibles en un líder). Pero cuando no actúan según lo dicho, se muestran como un ser irrespetuoso al que no le importa nada ni nadie. Después de todo, si el jefe no cumple con su palabra, ¿por qué habrían de hacerlo los demás?

 

16. YA PROMOVIERON A OTROS MENOS A TI

 

Los empleados que trabajan muy duro suelen querer colaborar con colegas que se esfuercen de la misma manera. Cuando los jefes no se afanan en contratar buenas personas, se desmotivan. Promover a los empleados incorrectos es aún peor. No hay un insulto mayor que asciendan al compañero que no hace nada cuando tú trabajas con todo tu esfuerzo.

 

17. NO TE DEJAN PERSEGUIR TUS SUEÑOS

 

Los empleados talentosos suelen ser muy apasionados. Ofrecerles oportunidades para perseguir sus sueños mejora su productividad y la satisfacción con su trabajo. Pero muchos jefes quieren que sus empleados trabajen dentro de una cajita hecha de reglas.  Temen que la productividad disminuya si sus trabajadores no están enfocados 300 por ciento en su trabajo. Sus miedos carecen de fundamento porque estudios demuestran que las personas que son capaces de seguir sus pasiones dentro de sus empleos experimentan una especie de “elevación”, un estado mental de euforia que les permite ser hasta cinco veces más productivos que los demás.

 

18 NO TE AYUDAN A DESARROLLAR TUS HABILIDADES

 

Hay jefes que desconocen la operación diaria de sus empleados y que tratan de excusarse diciendo que confían en ellos y que sus trabajadores son autónomos. Esto no es algo que sea correcto. Los buenos gerentes dirigen, sin importar que tan talentosos sean sus colaboradores. Ponen atención a las labores de sus equipos y constantemente ofrecen retroalimentación.

Al ser jefe se deben encontrar las áreas de oportunidad de los mejores empleados para que puedan desarrollarse. Si no lo hacen, sus colaboradores se aburrirán y se irán. Y por otro lado debemos ser buenos colaboradores y aceptar la retroalimentación.

 

19 ADIOS A LA CREATIVIDAD

 

Los empleados más talentosos buscan mejorar todo lo que tocan. Si les quitan la habilidad de innovar porque la empresa se siente cómodo con el status quo, harán que odien sus trabajos. Encerrar el deseo innato de mejorar no solo limita al equipo, limita el crecimiento de la compañía.

 

20 SE ESTÁ AFECTANDO TU CALIDAD DE VIDA

La distancia hace que pases gran parte de tu tiempo en traslados, la zona en donde trabajas no es de lo mejor, que no haya lugares para comer o qué tu centro de trabajo este alejado de todo, son algunos factores que podrían llevarte a evaluar si estás en la compañía adecuada. Que los horarios de trabajo sean tan demandantes que no tengas tiempo de hacer cualquier otra cosa o dedicarte más tiempo a ti o a tu familia. Todos queremos un buen trabajo, pero si alguno de estos factores amenaza tu calidad de vida, necesitas hacer un balance entre tu vida profesional y lo que quieres para ti y los tuyos.  

HORA DE HACER RETROSPECTIVA

Si estás siendo víctima de uno o más de estos indicadores, podría ser el momento de reevaluar en qué lugar de tu carrera te encuentras. Por supuesto, podrías encontrar estas condiciones soportables. Pero de cualquier manera, siempre es bueno realizar un inventario mental y emocional de la posición en tu carrera.

Bibliografía.

Artículo: "10 SIGNS YOU MIGHT BE WORKING FOR THE WRONG COMPANY" Jack Wallen. Tech Republic 2019.

https://pyme.lavoztx.com/las-diez-mayores-razones-por-las-que-la-gente-renuncia-su-trabajo-13786.html

https://www.entrepreneur.com/article/268937

bottom of page